EDUCACIÓN DEL DOLOR
DEFINICIÓN DE DOLOR
Se puede definir dolor como una experiencia sensorial y emocional desagradable que puede asociar daño a algún tejido del cuerpo o un potencial daño.
El dolor tiene una función fisiológica que consiste en proteger a la persona de las agresiones y, una vez sufrido el daño, ayuda a la reparación de los tejidos mediante el reposo del área afectada.
COMPONENTES DEL DOLOR
El dolor comienza con un estímulo desde el exterior que siente el individuo, es captado mediante receptores que están en la piel y en los distintos tejidos y órganos, ese estímulo que los receptores captan, viaja al sistema nervioso central y se procesa, integra e interpreta como “dolor”.
El dolor tiene tres componentes.
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Sensitivo: es el impulso desencadenado desde los receptores del dolor.
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Cognitivo: se relaciona con el aprendizaje cultural respecto al dolor y lo que significa.
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Emotivo-afectivo: estas son las emociones frente al dolor y cómo influyen en la interpretación del mismo.
SÍNTOMAS DEL DOLOR
El síntoma que provoca el dolor es una sensación de malestar, disconfort o molestia en alguna parte del cuerpo. Las personas pueden describir esa sensación como una molestia, disconfort, quemazón, picazón, electricidad, opresión, etc.
Cuando una persona experimenta dolor, su cuerpo reacciona y ese dolor puede estar acompañado de manifestaciones como: dilatación de las pupilas, sudoración en las manos, conducta de escape y las vocalizaciones variadas (grito, gimoteo, sollozos).
Una persona puede experimentar dolor en distintos sitios de su cuerpo, dependiendo del lugar afectado, será el tipo de sensaciones que experimente. Por ejemplo, el daño puede estar ocurriendo en la piel, los músculos, los huesos, los tendones, las vísceras, las articulaciones o en el tejido nervioso (nervios), entre otros lugares.
Los síntomas de dolor pueden ser sensaciones localizadas y precisas o por el contrario difusas y difíciles de localizar.
Según el tiempo de duración del dolor puede ser agudo o crónico. Y según su intensidad, puede ser: leve, moderado o severo.
DIAGNÓSTICO
DEL DOLOR
Para realizar el diagnóstico de dolor se debe identificar el tipo de dolor, la causa, la intensidad del dolor y las complicaciones asociadas.
Para llegar a dicho diagnostico, el profesional de la salud realizará la historia clínica y el exámen físico, y de ser necesario se complementará el diagnostico con imágenes como pueden ser radiografías, ecografías, tomografías computadas, resonancias magnéticas, entre otros.
MANEJO
DEL DOLOR
Las principales maneras de manejar el dolor son los tratamientos farmacológicos (analgésicos, analgésicos tópicos, antiinflamatorios, entre otros), combinado con medidas físicas (aplicación de compresas frías o calientes, la práctica de ejercicio, rehabilitación física) y psicosociales.
Con lo mencionado anteriormente en la mayoría de las personas se consigue un control satisfactorio del dolor.